Cuidado con la Necedad - Semana 6

Eclesiastés 10:1-10 : Cuidado con la Necedad

Conectarse los unos con los otros

Reflexiona con el grupo una ocasión en que fuiste necio y tu necedad tuvo consecuencias. Por ejemplo, Ricardo mencionó como consecuencia de no prepararse para el examen de CPA le costo el haber reprobado.

Entendiendo la verdad juntos Verso por verso-Tópico por Tópico- Argumento por argumento

Lee Eclesiastés 10:1

1. ¿Por qué “un poco de insensatez pesa más que la sabiduría y el honor?” Ver ejemplo de Pedro en (Mateo 16:16-23). ¿Cómo su insensatez peso más que la sabiduría que mostro?

Lee Eclesiastés 10:2-3

2. ¿De que manera un necio le demuestra “su falta de entendimiento a todos? Lee 1 Samuel 25:14-25. ¿Cómo demostró a todos Nabal su insensatez?

Lee Eclesiastés 10:4

3. Comparte como mantenerte sereno ayudo a que una situación difícil se mantuviera bajo control en tu trabajo.

Lee Eclesiastés 10:5-7

4 ¿Cómo afecta que gobernantes le den el puesto a amigos y familiares sin experiencia (nepotismo) y dejen sin oportunidad a gente preparada?

Lee Eclesiastés 10:8-10

5 ¿Qué peligro te puedes exponer si no eres precavido al hacer un hoy o derribas una pared (8) o trabajas en una cantera (9) o cortas leña (10)?

Viviendo la verdad conforme somos enviados

El punto del sermón fue: La sabiduría dada por Dios evita problemas innecesarios en nuestra vida. Reflexiona sobre problemas innecesarios que tu hubieras ahorrado si hubieses sido sabio.

Cristología

La sabiduría de Dios es la que nos ayuda a reconocer nuestra naturaleza perdida y la necesidad de un Salvador. Y es por eso por que Dios en su sabiduría le dio a Moisés la ley. No para

hacernos justos por seguirla sino para darnos cuenta nuestra inhabilidad de cumplirla. Entonces, Dios en su momento envío a su Hijo amado Jesús el único que cumplió la ley al pie de la letra al vivir una vida perfecta y sin pecado para que por medio de Él pudiéramos ser hechos justos (ver 2 Cor. 5:21). Sin embargo, Jesús al morir por nosotros resultó en necedad para el mundo. ¿Por qué? Ver 1 Cor. 1:18-21.

Orando unos con otros.

¿Como Podemos orar por ti en vista de lo que aprendimos en Eclesiastés 10:1-10